Tips para que tu hijo deje de comer viendo tele (e info de por qué no deben hacerlo)

“Prefiero que no termine a que coma viendo tele”, me acuerdo clarito que me decía el pediatra de MiEms cuando yo iba cuando Emma tenía año y medio. En mi desesperación -en esa época- no le hacía caso porque pensaba que era imposible, que se volvería raquítica, pero finalmente decidí escucharlo y traté. Hoy por hoy, realmente pienso que es importante comer en familia e inculcar ese hábito desde que son chiquitos.
Así que empiezo el post diciéndoles algunos motivos por los que los niños NO DEBEN COMER frente a la tele ni usando aparatos electrónicos y luego les contaré cómo hice para que Emma dejara de usar Youtube para comer.
Por qué no deben ver tele ni usar aparatos electrónicos mientras comen:
1. No se dan cuenta de lo que están haciendo (o sea comiendo). Se concentran más en lo otro (la tele) y por ende pueden querer comer más de lo debido. Las personas con sobrepeso, por ejemplo, suelen tener esta costumbre. Y es que si se ve televisión, se inhibe la sensación de saciedad (de “llenura”), ya que el cerebro está enfocado en otras cosas y comemos más. Esto pasa tanto en grandes como en niños.
2. Si se quedan con la costumbre de ver tele mientras comen (o con la tele «de fondo»), al final no conversarán ni interactúan con la familia. Este hábito tan bonito de comer juntos debe fomentarse de chicos. Es EL momento ideal para que hablen de cualquier cosa: el cole, anécdotas graciosas, deporte, amigos, etc. Si ambos papás trabajan, la chica que ayuda o la abuela pueden conversar también con el niño. Ellos tienen UN MONTÓN QUE DECIR. A partir de los 3-4-5 años, hablan sin parar, no? No los frenemos con un aparato.
3. Sin tele aprenden a comer mejor. Si por ejemplo, ustedes quieren que sus hijos coman cierta verdura o legumbre que a ellos no les gusta, y les ponen tele, no lo van a querer comer porque casi ni se van a dar cuenta de que ustedes lo hacen. Pero si ellos comen en una mesa viendo lo que las otras personas comen, ellos, en un tiempo, querrán probar. Quizás no el primer día, pero de repente el 3er día o dentro de una semana. Lo digo porque me pasó así. Emma no quería comer zanahorias, y una época yo comía full zanahorias. Le empezó a dar curiosidad y ella solita me pidió. Ahora le encantan, casi crudas. Conclusión: es más fácil de que aprendan buenos hábitos. Incluye sentarse bien, tener mejor postura, saber cómo se pone la mesa, etc.
Bueno, y cómo hice la transición? Porque sí, Emma, como desde el año hasta los 2, sí usaba el bendito Youtube para comer!! Lo que hice fue hacer el cambio gradual. Es decir, cuando dejé de ponerle televisión o el teléfono, le “puse” otra cosa. Según yo y mi pediatra: «era mejor que la tele”, me decía.
1. Primero cambié Youtube por algunos juegos didácticos. Me acuerdo que tenía unos bloques de madera buenazos para armar diferentes figuras. Se los ponía sobre la mesa y ella se entretenía con eso, mientras yo le daba.
2. Luego pasé a cosas para pintar. Tenía cartulinas blancas, hojas y algunos plumones. A veces yo dibujaba, a veces ella.
3. Y cuando ya se volvió ultra fan de los cuentos, le empecé a leer (y cuando yo no estaba lo hacía mi mamá o la chica que iba ese día. Les dije que no le pusieran TV). Esta última opción me pareció la mejor, porque la atención estaba dirigida a mi, a otra persona de la mesa. Ella escuchaba atenta, pero me miraba y a veces yo le daba opiniones de los libros y ella comentaba. Así, poco a poco, ya no era “sólo” leer, si no que se volvió un tipo de conversación. Claro, para mi era un tema, porque yo no podía comer, porque tenía que hablar y hablar sobre el cuento (si me demoraba leyendo, me acuerdo que Emma me apuraba jajaja), pero así fue dejando feliz Youtube.
4. ¿Cómo dejé de leerle mientras comíamos? Empezamos a hablar de sus días y yo de los míos o le contaba «datos locos» de temas que a ella le gustaban (todavía hago eso). Así de simple. Como ya estábamos acostumbradas a hablar bastante en las comidas (por los cuentos), se hizo fácil y natural. Emma nunca más me volvió a pedir tele (y mucho menos iPad) para comer. Como que no se lo ocurre. Sólo cuando vemos una peli en la casa, está permitido. Ahí sí harrrrta cancha como nos gusta! Jajaja
Espero que les sirva esta info. Varias me han escrito preguntándome tips sobre el tema y por eso lo escribí. OJO no es mi intención “mandonearlas” y decirles cómo hacer con sus hijos, simplemente para las que quieran esta ayuda, ahí está. Y bueno, algo más de info para que ustedes sepan y la tengan más clara. Acuérdense igual que cada niño es distinto y ustedes conocen a sus hijos mejor que nadie. Suerte!
PD: En los restaurantes tampoco recomiendo aparatos. Créanme, se que ahí es donde más cuesta, pero los niños también deben aprender a esperar. En todo caso es mejor llevar algo de pintar o una plastelina o limpia tipo. Yo siempre llevo un lapicero y un bloc chico en mi cartera y si el restaurante no tiene dibujos para pintar (aunque normalmente, la mayoría tiene), le doy unas hojas para que escriba o para que dibuje. Que deje de escribir es más fácil que deje un teléfono cuando llega la comida, además no se “pierde” en el mundo del aparato electrónico, igual interactúa con los que estamos en la mesa. Hoy en día, para mi no es nada fastidioso ir a comer con Emma a un lugar. Al contrario, me encanta! Y me gusta que pueda conversar mientras come.